La ciencia y la medicina se unieron para conformar uno de los principales aliados para la vida: las ventajas de la medicina genética sin innumerables. No sólo se trata de la detección de enfermedades antes del nacimiento, sino que también esta rama de la medicina detecta y analiza cualquier alteración genética.
La medicina genética permite desde hace mucho tiempo detectar lazos sanguíneos y de parentesco. En el pasado detectar el lazo filiatorio entre padre e hijo era prácticamente imposible. Es por esto que el principal beneficio de la medicina genética para la sociedad fue la prueba de paternidad. En segundo término, la detección precoz de patologías congénitas también es un adelanto que permite prevenir daños mayores al momento del parto y hasta realizar tratamientos paliativos ante ciertas patologías.
En cuanto al cáncer, los avances en la materia siguen dando que hablar. La detección temprana a partir de signos genéticos implicará un beneficio rápido y mayor en los pacientes. La ciencia busca acualmente generar pruebas menos invasivas como las que se realizan en cualquier prueba de ADN. De esta manera, los materiales biológicos extraídos a partir de la sangre, la orina y hasta la saliva en pacientes con alto riesgo puede ser un punto de inflexión.
Otro enfoque de la medicina genética es la búsqueda de nuevas técnicas de diagnósticos por imágenes, a fin de detectar aquello que no se ve a simple vista. Lo mismo ocurre con los signos que permanecen implícitos en el interior del organismo y que los profesionales de la salud no pueden descubrir. Para esto, la aplicación de Inteligencia Aritificial se vuelve cada vez más factible.
Los especialistas en genética revelan una verdad: «el problema elemental es que nunca vemos que un cáncer nazca en una persona». Y para acortar esa brecha se buscando cultivar el cáncer dentro del laboratorio, generando las condiciones por las cuales se desarolla. Así, al detectar las condiciones ideales para su aparición será menos complejo detectar de qué manera erradicarlo.
La opción del banco de tejidos vivos
Teniendo en cuenta la complejidad que es analizar a un paciente con cáncer, por todo lo que conlleva la propia enfermedad, la alternativa del banco de tejidos toma fuerza. Se trata de acumular tejidos vivos fuera de los pacientes para investigar todo lo inherente a la enfermedad. Otra vertiente científica expresa que también debe hacerse foco en la particularidad genética de cada persona y el entorno en el que se desarrolla. Así, se logrará determinar la potencialidad de adquirir este tipo de patología grave en individuos con similares factores biológicos y ambientales.